Aún recuerdo todo lo que pasó el año pasado por la pandemia del coronavirus. En el tiempo confinado aprendí…
Primeramente, a hacer cosas nuevas que antes no hacía, por pereza o por falta de tiempo. Además, empecé a valorar más el tiempo con mi familia, y la necesidad que realmente tenía y no sabía, de disfrutar de mis amigos, sin peleas.
En segundo lugar, conocí otra forma de estudiar que me hizo ver algo que antes no valoraba, que es la importancia y la suerte que tenemos de poder asistir a clases. Entonces, también aprendí a valorar la labor de los servicios de sanidad, los de limpieza y los del supermercado.
Finalmente, me ayudó a tener una nueva visión de vida. Empecé a darme cuenta que esta se puede acabar antes de lo que queremos, y tenemos que valorar más todo, porque nunca sabemos cuándo acabará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario