miércoles, 3 de junio de 2020

Hola, yaya. 
Hace mucho tiempo que estamos en casa encerrados. Con lo rápido que nos dijeron que no podíamos salir, no pude ir a tu casa a despedirme. Ahora solo puedo hablar contigo por teléfono y algún día por video llamada como por tu cumpleaños. Tengo muchas ganas de verte, yaya. Me encanta poder ir a dormir contigo los fines de semana y pelearnos por decidir qué me haces de cena. Que me regañes por dejarlo todo desordenado y por llegar cinco minutos tarde de la hora. Creo que cuando todo esto pase vas a verme mucho más.
Estos días son bastante aburridos y la verdad que quiero que todo pase para poder estar con vosotros. Los primos, los tíos,… Me imagino verlos de nuevo a todos juntos en el manso como hemos hecho siempre. ¡He escuchado que falta menos para poder ir a verte por la ventana!
Nos vemos pronto, 

Tu nieto.

lunes, 25 de mayo de 2020

DESPUÉS DE UN AÑO...


Ya pasó un año desde la amenaza mundial del coronavirus. En aquellos tiempos lo pasé muy mal, hubo muchas pérdidas; no obstante, aproveché para hacer muchas cosas con tanto tiempo libre.
En el momento en que el coronavirus empezó y tuvimos que quedarnos encerrados en casa, los días se me hacían eternos y me aburría mucho, por eso, empecé a hacer animaciones fotograma a fotograma. Las animaciones eran cortas y divertidas. Me lo pasé muy bien haciéndolas, pero al final se me acababan las ideas. 
En esos días, me di cuenta que quizás no apreciaba las cosas del día a día lo suficiente, lo que antes era salir a la calle con mis amigos se convirtió en no poder salir de casa, incluso tenía ganas de ir al instituto para verme con todos los profesores y alumnos, cosa que a mí no me gustaba nada antes.

SI ME HUBIERAN DICHO QUE ESTO PASARÍA...



En primer lugar, si me hubieran dicho que esto pasaría habría intentado avisar a todo el mundo; aunque, seguramente, no me habrían creído.

En segundo lugar, no habría actuado muy diferente porque creo que he actuado bien en esta situación. Lo único que habría cambiado sería que me habría despedido de mis familiares, habría comprado un montón de guantes y mascarillas antes de que su precio se disparara y se agotaran. 

Por último, me había mentalizado bien para esta situación.

EL CORONAVIRUS DEJÓ HUELLA


Para empezar, lo que nos pasó el año pasado, nos enseñó que la humanidad es muy frágil. Por culpa de un virus, ha muerto mucha gente. Algunas personas han tenido que pasar la cuarentena solos, sin su familia. 
Por un lado, los trabajadores han mostrado, valentía y sacrificio por todos nosotros. Pero no había suficientes profesionales sanitarios, por eso, el gobierno tiene que contratar más sanitarios.
Como tenía mucho tiempo durante la cuarentena y me te aburría, aprendí a cocinar, limpiar la casa, hacer manualidades…
Por último, aún hay gente que está infectada, aunque haya una cura, aunque eso irá cambiando con el paso de los años.